Gordos

Aunque son noticias de hace ya unos días, me llamaron la atención y las tenía por ahí guardadas por su relación con Estados Unidos y NYC en concreto. Una de las cosas que me llamó la atención en el viaje es que en la mayoría de locales de comida rápida (que fue la base de mi alimentación neoyorquina), al lado del precio de las cosas aparecían las calorías que contenían. La obesidad es un tema que preocupa, y mucho, en un país en el que más del 60% de su población padece sobrepeso.

El 1 de julio entró en vigor en Nueva York una ley para eliminar la presencia de grasas saturadas en los menús. Pero la lucha aún continúa. Una de las guías que tuvimos nos contó algunas de las claves del problema con la obesidad que tienen en EE. UU. Por una parte, se calcula que un tercio de las comidas las hacen fuera de casa, no es nada raro ver comer a los neoyorquinos en parques o bancos por la calle. Por otro lado, las distancias en este país son enormes, por lo que la gente se ha vuelto sedentaria: cogen el coche para cualquier cosa. Ahora se está poniendo de moda los restaurantes y tiendas de comida sana, orgánica. Y parece que es algo con lo que están muy concienciados.

Pero el sobrepeso no es un problema sólo de Estados Unidos. En Reino Unido, los medios "estigmatizan" a los gordos (¿sólo en Reino Unido?). En Japón, las empresas miden el perímetro abdominal en sus revisiones médicas anuales para intentar reducirlo en los próximos años. Si no se adelgaza, se penalizará a las empresas, que, en cambio, premian a sus empleados si lo consiguen.

En conclusión: la obesidad es un problema mundial. Mientras unos países se inflan a comer, otros mueren de hambre. Así es esto de injusto.