domingo, 28 de febrero de 2010

Café y periodismo


Ayer estuve con Eli en la primera edición de las tertulias de Café & Periodismo. El tema elegido fue los Nuevos Medios, con la presencia de Pedro de Alzaga, que nos habló sobre Cuarto Poder, y Alfonso Armada, para hablar de FronteraD.

Tras contarnos sus experiencias de forma breve, se pasó al turno de preguntas y la tertulia, lo más interesante de la tarde.

Visto el éxito de la primera quedada, seguro que habrá muchas más. Nos seguiremos viendo por ahí. Mientras, os dejo un pequeño vídeo con algunos momentos de la tarde de ayer.

I Edición de Café y Periodismo from Natalia Marcos on Vimeo.

sábado, 27 de febrero de 2010

"Harrison Ford: Citado con dos alcalaínas y una le dio plantón"

Hoy vuelvo a salir en portada del Diario de Alcalá acompañada de Harrison Ford. Esto es lo que Xavi Colás ha escrito dentro sobre la entrevista digital con ElPaís.com y otra colega alcalaína que tuvo que dar plantón a Harry ;)
Compartir 30 minutos hablando con el guaperas que encarnó a Indiana Jones o Han Solo es un lujo que pocas se pueden permitir y al que casi nadie podría renunciar. Natalia Marcos, periodista de elpais.com y bloguera de Alcalá, está acostumbrada a entrevistar a famosos. A sus 26 años es una de las responsables de las entrevistas digitales del principal periódico nacional: Alejandro Amenábar, Ferrán Adriá o Alejandro Sanz han pasado por sus teclas. El jueves, sin embargo, su entrevistado fue alguien de un calibre mucho mayor: el actor al que tantas veces ha visto en su papel de Indiana Jones, y que ahora promociona su nueva película, Medidas extraordinarias.

"Nice to meet you", encantado de conocerte, fue el prólogo de la charla, en la que ella desgranaba preguntas de los lectores e iba tecleando las respuestas de Ford. "Los dedos me temblaban un poquillo", recordaba ayer. Mientras, cuenta Natalia, Harrison Ford se daba paseos por la habitación riendo con algunas preguntas, como la que hacía referencia al la vez en la que fue elegido hombre más sexy del año. "Una traductora nos iba ayudando, pero aunque estaba nerviosa sobre todo estaba pendiente de que todo fuese bien con la conexión", pues las respuestas se van posteando en tiempo real.

Al acabar, una foto para la posteridad... pese a los problemas del flash al primer intento, que el propio Ford solucionó con indicaciones a su ayudante: "Cuando regresé a la redacción era la envidia de todo el mundo".

¿Envidiada por todo el mundo? No lo será por Ana Manjón, también periodista y también alcalaína. También tenía asignado entrevistar al actor el mismo día para una agencia que hace contenidos para internet, pero no fue porque tenía un reportaje en Guadalajara casi a la misma hora. Otra persona se hubiese tirado de los pelos y pataleado. Ana no quiere sacar su plantón a Harrison Ford de quicio: "Cambié la entrevista con un compañero sin ningún tipo de pena, porque me parecía tal vez no más interesante pero sí más conveniente cumplir con otro encargo en otro sitio". ¿Otra vez será? Quién sabe: "La verdad no estoy pensando en volver a poder entrevistar a Harrison Ford", ríe quitando importancia a la oportunidad de ser envidiada por sus amigas, "sino más bien a Robert Redford, por el cual sí me hubiese puesto enferma para poder ir o hubiese defendido cubrir ese tema yo". Sólo admite que le hacía ilusión entrevistar a Ford "porque seria mi primer entrevista internacional". Visto con quien se codean ambas, seguro que todo llega.

jueves, 25 de febrero de 2010

Con Indiana Jones


Efectivamente, quien aparece al lado de Harrison Ford en esta foto soy yo misma. Después de media hora de preguntas de los lectores le tenía extasiado, pero todavía aguantó un minuto más para pararse y hacerse la foto de rigor conmigo.

Los dedos temblaban un poquillo, los nervios han hecho que dormir fuera complicado, pero ha merecido la pena. No estaba ni de buen humor ni de mal humor, pero ha sido muy majo. No todos los días se oye "Nice to meet you, Natalia" (encantado de conocerte, Natalia) saliendo de la boca de Harrison Ford mientras te clava la mirada y pone esa sonrisa de medio lado que le caracteriza.

Presenta Medidas extraordinarias, pero lo que nos interesaba es si habrá más Indiana Jones (puede ser, ha dado a entender). Y dice conocer el cine español, Buñuel y Almodóvar han salido de sus labios, controla.

Cuando esté el vídeo, también os lo pondré por aquí, cinco minutos dieron para poco, pero bien también. De la charla con los lectores se fue contento, le gustaron las cuestiones, paseaba por la habitación riendo con algunas de las preguntas y se acercaba por detrás del ordenador a ver cómo era todo al otro lado.

Y como llegó, se fue, triunfando, como siempre hace Indiana Jones ;)

jueves, 18 de febrero de 2010

Miguel Hernández

Soy de lágrima difícil (o lo era...). Me cuesta llorar.

Pero recuerdo perfectamente cómo, estudiando a fondo y con detenimiento la biografía de Miguel Hernández hace dos o tres años para Filología, las lágrimas fueron lentamente llegando a mis ojos hasta que tuve que parar. Algo parecido me pasó con García Lorca. Pero, no sé por qué, me dio más rabia aún la historia de Hernández.

Vidas duras, chungas, tuvieron mala suerte, y eso me da mucha rabia. La literatura española se perdió grandes cosas por culpa de la Guerra.

Ahora, llegando el centenario del nacimiento de Miguel Hernández, el Gobierno declarará injusta su condenado a muerte tras la Guerra Civil. Una declaración que no le devolverá la palabra, pero reparará el daño que se hizo a su memoria.

domingo, 14 de febrero de 2010

La pasión

El tipo puede hacer cualquier cosa para ser distinto; pero hay una cosa que no puede cambiar... ni él, ni vos, ni yo, nadie [...] El tipo puede cambiar de todo: de cara, de casa, de familia, de novia, de religión, de Dios... pero hay una cosa que no puede cambiar... no puede cambiar de pasión.

Ayer vi El secreto de sus ojos, buenísima. Hoy, los Goya y el Atleti-Barça.

martes, 9 de febrero de 2010

Coca-Cola en cualquier parte

Porque siempre puede venir bien tener una máquina de Coca-Cola a mano, ¿por qué no una en medio de la nada?

Visto en el campus de la UAH

domingo, 7 de febrero de 2010

In treatment

Descubrí In treatment (En terapia lo llamaron en España) gracias a Casciari y su insistencia el año pasado con las grandezas de esta serie de la HBO. Las novedades que traía hacían que la curiosidad por la serie aumentara: emitida diariamente de lunes a viernes y con formato más cercano al teatro que al televisivo, nos invita a asistir a las sesiones de terapia de un psicólogo y sus pacientes de lunes a jueves y a la visita a una colega psicóloga los viernes. Con un argumento tan básico está claro que la base de la serie debe estar en los diálogos y en los personajes, no hay más de donde tirar.

Y así es. El hilo conductor lo tenemos en Paul, el psicólogo, Gabriel Byrne. Pero lo que nos va enganchando es la historia de los pacientes, saber qué les pasa, ahondar en sus personalidades y en las relaciones que establecen con su terapeuta, relaciones a veces bastante conflictivas. En la primera temporada, los protagonistas de verdad serán los pacientes y su relación con Paul.

Pero, por suerte, tras una excelente primera temporada, tuvimos una segunda, en la que se mantiene el nivel, con menos capítulos que la primera temporada (la larga duración de la primera temporada, con 43 episodios, es quizá lo peor de la serie; por eso, la segunda se queda en 35 capítulos). Pero en esta ocasión se podría decir que el protagonismo pasa de los pacientes al propio psicólogo, Paul, que tendrá que hacer frente a las consecuencias de la anterior temporada en varios sentidos (no quiero espoilear a nadie, perdonad mi ambigüedad).

Teatro en estado puro por la tele de la mano del hijo de Gabriel García Márquez, Rodrigo García, calidad asegurada. Ah, no la he visto doblada, pero seguro que pierde bastante, yo de vosotros me lanzaría a por la serie en versión original sin dudarlo. Además, así podréis ir conociendo a la que será la Alicia de Tim Burton.

martes, 2 de febrero de 2010

True Blood: Sexo, drogas y... sangre

Empecé a ver True blood con mis reservas: las historias de vampiros no me apasionan. Sin embargo, la fama le precede, y ser del creador de A dos metros bajo tierra, de la que he terminado hace poco la segunda temporada, me terminó de convencer. Además, 12 capítulos por temporada me parece lo suficientemente breve como para darle una oportunidad.

Y me alegro. Me ha entretenido, me he reído, e incluso en el final de la temporada me sorprendieron (me dejé llevar por los guionistas y pensaba que el asesino era otra persona, inocente de mí).

Creo que no soy la única que lo piensa: Sookie, la protagonista, que puede leer los pensamientos de la gente (y no sé para qué le sirve...), es odiosa. Pero se compensa con el vampiro Bill, por supuesto. Luego están Sam, el dueño del bar y que esconde un secreto, Tara, la amiga con una complicada vida personal, Jason, el hermano de Sookie siempre metido en líos... Para ser un pueblo tan pequeño da para bastante.

Los vampiros acaban de "salir de la tumba", y los conflictos sociales no han hecho nada más que empezar. Desde una perspectiva diferente vemos reflejado el racismo, la exclusión social o el problema de las drogas. Porque no todo va a ser vampiros y colmillos.

Aunque no puedo evitar acordarme muchas veces de Buffy y reirme un montón cada vez que los vampiros sacan sus colmillos o que los capítulos terminan con Sookie gritando, seguiré viendo la serie, ya estoy descargando la segunda temporada.