La vida de cualquiera, narrada simple y sencillamente, puede ser una novela. La gracia está en cómo se cuente. Es lo que tiene Cuatro hermanas, el único libro de Jetta Carleton, que pretende contar la vida de una familia de Misuri, que vive la mayoría del tiempo en una granja.
El libro se divide en la historia de las tres hijas mayores y los dos padres, cada uno con sus deseos satisfechos e insatisfechos, sus secretos y sus amores.
Narrado de una forma sencilla, no termina de apasionar pero tampoco te lleva a abandonar, una lectura sin más que se lee y se olvida igual de fácilmente. Una novela de personajes, con los sentimientos por encima de la acción y la sencillez del mundo rural que agobia y satisface a partes iguales a los protagonistas. Una historia de la vida, sin más.